“Mi casa, mi tesoro”. Un artículo de colaboración de Francisca Carrasco

Todos lo que estamos en modo confinamiento hogareño en estos últimos días, y los que aún nos quedan por pasar, nos planteamos el concepto de vivienda que nos hubiera gustado tener para pasar estos días de la mejor manera posible.

Los días en los hogares familiares están repletos de nuevas actividades que necesitamos realizar dentro de nuestras paredes. Se han convertido en colegios, gimnasios, salas de audiciones musicales y grabaciones, fogones de los mejores chefs, ….y todo esto y mucho más dentro de una CASA .

Sin duda, habrá un antes y un después, de cómo nos vamos a plantear los arquitectos los diseños de las viviendas. Hay que crear espacios cien por cien multidisciplinares y multifuncionales.

En tu próxima reforma trata de aprovechar al máximo la luz natural. Convierte varios espacios pequeños en un gran espacio, amplio, iluminado y bien ventilado  donde se desarrolle la vida social de la familia. Elimina pasillos tortuosos y oscuros, que además de consumir metros sin aprovechamiento, son clave a la hora de plantear una reforma. Renueva el baño: busca materiales que sean esencia de naturaleza.  El color de tu hogar debe generar serenidad y armonía en el ambiente. Trabaja una paleta de color neutra sobre la que trabajar y, por qué no, también puedes darle toques divertidos.

Mi consejo para estos días es el de intentar sacarle el máximo rendimiento a lo que tenemos en casa. Sube la persiana hasta arriba, y deja que la luz natural lo inunde todo.  Aprovecha estos largos días para ordenar y vaciar armarios de cosas que ni sabes que estaban ahí, y también recuperar enseres a los que podemos darles una segunda vida con una capa de pintura. Un toque vintage siempre es de agradecer. Es buena época para cambiar la decoración de invierno a soluciones más frescas y primaverales. Crea ambientes informales pero a la vez con su punto de elegancia. La combinación del trío blanco-madera-fibras naturales es una apuesta segura. Viste todos los días la mesa para comer, ahora que tienes tiempo. Coloca la mantelería que tienes en el fondo del cajón, saca la cubertería que tenías olvidada y esas bonitas copas que apenas estrenaste, y de paso recuerda ese día especial en vuestro restaurante favorito. Dale presencia en tu salón a los libros y a la música, te harán sentir mucho mejor.

Disfruta de tu pequeño balcón,  terraza o de tu  bonito jardín, llenándolos de  flores, aromas, farolillos y  velas,  seguro que se convertirá en una buena vía de escape. Apuesta por lo natural: los textiles de algodón, las fibras naturales y elementos de madera sin tratar son elementos de tendencia en las decoraciones de exterior.

Y recuerda, tu CASA es tu refugio y tu espacio seguro, conviértela en tu lugar favorito.

Un artículo de colaboración de Francisca Carrasco. Arquitecta.

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Francisca Carrasco es arquitecta y gerente de la empresa de reformas de Campoamor Happy Home

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