El Restaurante Piccolo, ubicado en Plaza Nueva en la Torre de la Horadada, de comida italiana, mejicana y mediterránea cuenta con una carta bastante amplia, pues sirven tanto desayunos como comidas y cenas.
Nosotros éramos dos y desde que llegamos los camareros se mostraron muy agradables y atentos, abiertos a dirigirse a nosotros tanto en español como en inglés con fluidez. El sitio estaba muy limpio y era luminoso. Por su cercanía al mar, en verano corre una brisa fresca muy acogedora.
Fuimos a cenar y nos decantamos por el toque mejicano. Como entrante nos ofrecieron un pan casero, crujiente y recién salido del horno, con una salsa de yogur. Luego, pedimos unos nachos con guacamole y queso tradicionales.
Como plato principal tomamos unas quesadillas de pollo con verduras asadas acompañadas con patatas fritas y ensalada y para beber pedimos un par de copas de vino tinto.
Además de la gran variedad de platos, el restaurante Piccolo cuenta con una excelente relación calidad-precio, de entre 5 y 20€. Nosotros tocamos a 12€ por persona incluyendo bebida.