Despedir el año caminando junto al mar: el gran paseo litoral desde Campoamor
Hay muchas formas de despedir el año. Con ruido, con prisas, con agendas llenas.
Y luego está esta otra: caminar junto al mar, en silencio, dejando que el Mediterráneo marque el ritmo.
Esta Navidad, desde Campoamor.com proponemos un reto sencillo y profundamente especial: recorrer el sendero litoral que une Campoamor con Torrevieja, siguiendo los acantilados y calas de la costa, siempre con el mar a un lado y la calma al otro.
Un camino que empieza en casa
La ruta arranca en Playa de la Glea, uno de esos lugares que muchos conocen en verano, pero que en invierno se transforma por completo. Menos gente, luz más suave y una sensación clara: aquí empieza algo distinto.
Desde ahí, el camino avanza hacia los acantilados de Cabo Roig, un tramo ya conocido por su Sendero Azul, pero que es solo el principio de un recorrido mucho mayor.
Siempre el mar, siempre adelante
Tras Cabo Roig, el paseo continúa hacia La Zenia, enlazando con tramos cada vez más abiertos y visuales. El Mediterráneo acompaña en todo momento: a veces tranquilo, a veces bravo, pero siempre presente.
El camino pasa por la conocida Playa de los Perros, atraviesa Playa Flamenca y llega hasta Cala Mosca, un espacio que, pese a los cambios urbanísticos, aún conserva esa sensación de frontera entre lo natural y lo humano… y que todavía se puede recorrer a pie.
Desde allí, para quienes quieran seguir, el sendero permite continuar en dirección a Torrevieja, completando un recorrido litoral largo, continuo y sorprendente.
En total, hablamos de más de 10 kilómetros de paseo junto al mar, siempre con vistas abiertas y sin necesidad de coche.
Un paseo para la cabeza, no solo para las piernas
Este no es un paseo para correr.
Es un paseo para pensar, para cerrar ciclos, para caminar solo o en buena compañía. En Navidad, cuando la costa se vacía, el sendero se convierte en un lugar casi íntimo, donde cada paso tiene algo de ritual.
No hay multitudes.
No hay música alta.
Solo el sonido del mar, el viento y tus propios pensamientos.
La otra forma de despedir el año
En Campoamor.com creemos que este paseo es una metáfora perfecta del final de año:
un camino largo, hermoso, a veces exigente, pero siempre con recompensa.
Si este diciembre te apetece despedir el año en silencio, lejos de fuegos artificiales y listas de propósitos, quizá este sendero —tan cercano y tan desconocido— sea el mejor lugar para hacerlo.
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Nos vemos en Campoamor
