El puente que une las urbanizaciones interiores de Orihuela Costa con las urbanizaciones más costeras, en concreto nos referimos al existente en la CV-941 sobre la AP-7, es un puente solo de circulación de vehículos sin apenas arcén lo que obliga a los peatones a jugarse la vida cada vez que tienen que cruzar esta AP-7.
Esta historia viene de antiguo, nace cuando se desarrolló urbanísticamente la zona, en concreto el agente urbanizador, la mercantil Urbana San Miguel S. L., tendría que haber sido la encargada de construir este puente con paso peatonal dentro del programa de desarrollo de la actuación urbanística integrada del sector Lomas de Cabo Roig, estamos hablando de hace veinte años, sin embargo, la empresa ejecutó la urbanización pero se olvidó del puente peatonal.
La culpa, según la empresa urbanizadora, era la falta de un permiso de Carreteras del Estado. Dicho permiso hoy existe, se le ha reclamado la terminación de las obras, la empresa ha hecho caso omiso a dicho reclamación y el Ayuntamiento ya ha iniciado los trámites para la redacción del proyecto de esta pasarela no sin antes solicitar los avales que en su día presentó la urbanizadora por importe superior al millón doscientos mil euros, dinero que debe ser suficiente tanto para la adjudicación de la redacción del proyecto como para la ejecución de la obra.
Sabemos que los trámites administrativos suelen ser tediosos, tardan en realizarse pero todo llega. Sin duda es una buena noticia que se inicie los trámites para tener esa pasarela peatonal tan necesaria.
Nos vemos en Campoamor
En la fotografía vemos el puente que no dispone de zona peatonal ni arcén para que los peatones puedan cruzar sin riesgo la AP-7