La costa de Orihuela necesita unas fiestas propias, independientes a de las de la Ciudad, en las que tanto residentes como visitantes puedan disfrutar y sentirse representados. Con esta ambición nace el proyecto de fiestas para el distrito de Orihuela Costa.

 Existe una distancia mayor de los 40 km que separan la ciudad de Orihuela de sus playas, me refiero a una cierta desafección. Durante décadas se ha visto desde la ciudad a las urbanizaciones de costa como un lugar donde solo van y vienen turistas, como si no residiera nadie aquí, cuando ya somos varias generaciones y realmente sumamos más del 25% del total de municipio, en breve seremos el 30% (eso sin contar los extranjeros no empadronados). El núcleo urbano cuenta con 32.902 habitantes censados, y la Costa con 28.503 habitantes (censo de 2024). Por ello, la Costa se reivindica pues somos el segundo distrito municipal que más crece de España.

Una fiesta de piratas en verano

Desde Campoamor.com hemos empezado una andadura para crear unas fiestas locales. No se trata de ninguna tomatina, ni de carreras para coger sitio en la playa, ni tampoco concurrir con fiestas importadas como la de “San Patrick” de los irlandeses, o el “Oktoberfest” también conocida como la fiesta de la cerveza de origen alemán, si bien consiguen congregar a muchos ciudadanos de estos países, más otros tantos residentes locales. Esas fiestas se celebran en muchas ciudades del mundo, y no deja de ser un buen plan, pero no despierta un sentimiento de arraigo o pertenencia.

Por ello, creemos que Orihuela Costa se merece su propia fiesta, se trata de plantear unas fiestas, que sean nuestras, de aquí y que generen un arraigo a nuestra zona. Por ello hemos puesto el foco en una época histórica en la que el levante español tuvo un papel destacado. Un siglo después de la reconquista, cuando los reyes católicos expulsaron los moros de España, muchos de estos volvieron a España en ejerciendo la piratería. Fueron los siglos XVI y XVII, cuando los continuos ataques de los corsarios berberiscos tanto a la población de la costa como al comercio marítimo, desato grandes protestas que llegaron a Felipe II, el hijo de Carlos V (emperador), quien inició la construcción de varias torres de vigía, entre las que tenemos la de Cabo Roig, Torrevieja, Torre de la Horadada, y muchas otras que ya no existen hoy por los cañonazos que recibieron. Fueron años duros, en los que las galeotas y galeras berberiscas, zarpaban de distintos puertos del Magreb con patente de corso, (entiéndase como piratería autorizada por sus gobiernos), destacaron los puertos de Argel, Túnez, Salé, etc. Su forma de operar era interceptar el comercio marítimo entre Alicante y Cartagena. Sus refugios preferidos se encontraban en las islas de Tabarca (en Santa Pola) y la isla Grosa (en La Manga), ambas visibles desde Campoamor. Nos ha sorprendido saber que muchos de los corsarios que capitaneaban estos barcos eran conversos de origen europeo; españoles, franceses, holandeses e ingleses, principalmente.

Asistentes a la primera reunion del proyecto, en la que estuvo como invitado especial el historiador y escritor Francisco Velasco Hernandez – experto en pirateria y corsarismo del Levante. La jornada terminó con un caldero en el Restaurante el Pony.

Reivindicar un hecho histórico como la piratería en el Levante al mismo nivel, que la fiesta de moros y cristianos

Con esta base histórica, queremos hacer una fiesta distinta a la de Moros y Cristianos. De hecho, el protagonismo está en el mar y la playa. Así llegamos a nuestra primera propuesta:

1. Una Batalla Naval: imaginemos dos grupos de barcos (por un lado, los piratas y por otro las milicias españolas), que van costeando dando cañonazos, unos vienen de Torrevieja y otros de San Pedro, para encontrarse en la playa de la Glea. Aquí empieza una batalla entre ambas facciones. Desde Cabo Roig, vemos una defensa de la Torre, donde se produce una serie cañonazos, los barcos desde el mar también hacen ruido con sus Trabucazos y Cañones.
2. La playa tomada por los grupos o comparsas que vitorean a los suyos: Por un lado, varios grupos de piratas; holandeses, ingleses, franceses, etc. o que tengan como líder un pirata conocido, frente a grupos cristianos como pudieran ser los Tercios de Cartagena o similares donde tenemos famosos espadachines y héroes de ficción. Desde los barcos se lanzarían a nadar a la playa uno o varios guerreros que serían sacados del agua en volandas y hombros.
3. Lucha en fuego y hogueras: con la caída del sol, al atardecer rodeado de antorchas se realizaría un último duelo, (con especialistas), en los que dos personajes tipo capitán Alatriste frente a un John Ward (este último fue un gran pirata inglés, que se convirtió en un famoso corsario, por encarnar el personaje de Jack Sparrow de Piratas del Caribe, pero donde realmente estuvo saqueando fue aquí).
4. El campamento base o zona de casetas: La fiesta podría plantear un campamento base donde puedan establecerse los distintos grupos, peñas o bandos enfrentados pero hermanados por una fiesta que tiene por objetivo celebrar la vida en la costa y sobre todo haber elegido uno de los lugares más maravillosos del mundo para vivirla. Cada grupo representaría un pirata o un personaje legendario.
5. Eventos deportivos: Los puertos de Cabo Roig y Campoamor jugarían un papel muy relevante. Y serían las sedes para organizar algunos eventos deportivos; como podrían ser una regata de vela o a remo con piraguas, dragones o padel surf, incluso una de natación.

Enlaces de interés de la fiesta de los piratas de Orihuela Costa

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